Homeschooling o Colegio en Casa, una tendencia en auge
La metodología de “HomeSchool” o Colegio en Casa, ya se empieza a usar cada vez con más fuerza en Latinoamérica, pero ¿Cuales son sus pro y sus contras?
Hablar de educación flexible, autoaprendizaje, colaboración, educación en casa, educación en familia o educación sin escuela, son términos que podemos asociar a la metodología de homeschooling.
El término se refiere a una alternativa para la educación de los hijos de quienes tienen sistemas de vida muy particulares o aquellos que no ven la educación tradicional -pública o privada- en instituciones educativas como una opción válida para sus necesidades y expectativas.
Entre los perfiles que podemos incluir como usuarios potenciales del Homeschooling, están aquellas familias donde los padres viajan mucho o cambian frecuentemente de lugar de residencia, jóvenes que por destacar en algún deporte o arte deben asistir a compromisos de forma frecuente, víctimas recientes de bullying o acoso escolar, alumnos con necesidades especiales y personas con pensamiento muy crítico o limitaciones religiosas.
Como todo sistema educativo, el Homeschooling tiene elementos que se pueden considerar positivos y otros que no lo son tanto. Entre los aspectos que podríamos indicar como buenos, está el hecho de una educación personalizada, a medida, con fuerte atención al progreso del alumno y sus necesidades directas, la cual puede ser de mucha ayuda en el caso de niños especiales o con dificultades de aprendizaje. También es positivo el hecho de ser un sistema capaz de ayudar a familias que por determinadas circunstancias (que podrían ser temporales), les es muy complicado enviar a sus hijos a una institución educativa.
Entre los aspectos no tan positivos del homeschooling podemos encontrar que por lo general existe una falta de preparación formal de las personas que sirven de Maestros o Tutores de los niños (que muchas veces son los padres), adicional a la falta de formalidad que se da respecto a cumplimiento de horarios y obligaciones como consecuencia de estar en casa y en familia. Otro factor que podría considerarse muy negativo es la falta de comunicación y contacto físico con otras personas, lo que puede llevar a privar al niño de conocer otras experiencias y formas de pensar, pudiendo caer el proceso de enseñanza-aprendizaje en adoctrinamientos hacia la forma de ser de quien enseña, lo cual termina por dificultar el desarrollo social y la posterior adaptación a la vida real.
El homeschooling es un tema muy controvertido y aunque todavía no hay cifras oficiales respecto a esta modalidad de enseñanza-aprendizaje, analistas y expertos del sector educativo indican que el número de familias que educan a sus hijos en casa está aumentando, sobretodo porque se sienten decepcionadas por la pobre educación de algunas Escuelas y Colegios, no obstante, indican que aún no se debe ver como una preocupación, pues el fenómeno sigue siendo algo minoritario.
Tanto en países Europeos como Estados Unidos, el homeschooling es una alternativa reconocida y algo usada, sin embargo, hay que tener claro que así como hay historias de éxito que alientan a quienes pudiesen estar pensando en esta opción, también existen muchos casos de personas que fracasaron en el intento.
En Guatemala, el Ministerio de Educación no reconoce directamente con esta modalidad, sin embargo, si reconoce la educación a distancia donde el estudiante no asiste físicamente a la institución ni a las clases.
La recomendación si desea intentar este tipo de educación es pensarlo y evaluarlo muy bien, hablar con expertos y profesionales del tema, así como acercarse al Ministerio de Educación para validar personalmente todas las implicaciones y el proceso que se requiere para no perder tiempo ni esfuerzos.