¿Cómo enfrentar el Bullying en la Escuela?
Si están siendo acosados o intimidados por otros niños deben buscar ayuda con sus padres, profesores o buscar orientación para poder combatir el problema. Para eso existen muchas organizaciones e individuos que pueden brindarles ayuda
¿Qué es la intimidación?
La intimidación es un tormento intencional en formas físicas, verbales o psicológicas. Puede ir desde golpes, empujones, insultos, amenazas y burlas hasta extorsionar dinero y posesiones. Algunos jóvenes intimidan al rechazar a otros y difundir rumores sobre ellos. Otros usan las redes sociales o mensajes electrónicos para burlarse de otros o herir sus sentimientos.
La mayoría de los jóvenes han sido molestados por un hermano o un amigo en algún momento. Y no suele ser dañino cuando se hace de una manera lúdica, amistosa, mutua, y ambas partes lo encuentran divertido. Pero cuando las burlas se vuelven dañinas, poco amables y constantes, cruzan la línea de la intimidación y deben detenerse.
¿Por qué intimidamos a otras personas?
Los jóvenes intimidan por una variedad de razones. A veces se burlan de los otros porque necesitan una víctima, alguien que parece emocional o físicamente más débil, o simplemente porque actúan o parecen diferentes de alguna manera; y lo hacen para sentirse más importantes, populares o tener el control.
A veces los jóvenes atormentan a otros porque esa es la forma en que han sido tratados. Pueden pensar que su comportamiento es normal porque provienen de familias u otros lugares donde todos se enojan con frecuencia y gritan o se llaman entre ellos. Algunos programas de televisión populares incluso parecen promover la mezquindad: las personas son \"rechazadas\", rechazadas o ridiculizadas por su apariencia o falta de talento.
Encontrar ayuda
¿A dónde puede acudir en busca de ayuda? Hay muchas organizaciones e individuos que pueden brindar orientación, incluidos los consejeros escolares, los docentes y los terapeutas profesionales. Pero si simplemente quieren información, o quieren leer artículos sobre intimidación que puedan ayudarlos al respecto, existen muchos recursos: libros, artículos y sitios web que pueden proporcionar toneladas de consejos, estadísticas y recomendaciones sobre cómo reconocer y manejar una situación de intimidación.
Algunos consejos
Algunos padres pueden llegar a decirles que se defiendan. Después de todo, están enojados porque su hijo está sufriendo. Pero es importante que no respondan a la intimidación peleando o intimidando. En cambio, es mejor alejarse de la situación, pasar tiempo con otros y contarles a un adulto.
Aquí hay algunas otras estrategias que ustedes pueden seguir para ayudar a mejorar una situación similar:
- Eviten al abusador y usen el sistema de amigos. Usen un baño diferente si hay un acosador cerca y no vayan a su casillero cuando no haya nadie cerca. Asegúrense de tener a alguien con ustedes para que no estén solos con el abusador. Hagan amistad con un amigo en el autobús, en los pasillos o en el recreo, donde sea que esté el acosador. Ofrezca hacer lo mismo para un amigo.
- Practiquen no reaccionar llorando lucir molestos. Requiere mucha práctica, pero es una habilidad útil para mantenerse alejado del radar de un abusador. A veces, a los los adolescentes les resulta útil practicar estrategias de \"relajación\", como contar hasta 10, escribir palabras cuando están enojados, respirar profundamente o alejarse. A veces, lo mejor que se puede hacer es aprender a usar una \"cara de póquer\" hasta que estén libres de cualquier peligro ya que sonreír o reírse puede provocar al agresor.
- Aléjense e ignoren al abusador. Firme y claramente díganle al acosador que se detenga y luego aléjense. Practiquen formas de ignorar los comentarios hirientes, como desinteresarse o enviar mensajes de texto a alguien en su teléfono celular. Al ignorar al agresor, están demostrando que no les importa. Eventualmente, el abusador probablemente se aburrirá tratando de molestarles.
- Cuéntenle a un adulto. Los maestros, directores, padres y el personal de la cafetería pueden ayudarlos a detener la intimidación.
- Hablen al respecto. Hablen con alguien en quien confíen, como un consejero, maestro, hermano o amigo. Pueden ofrecerles algunas sugerencias útiles, e incluso si no pueden solucionar la situación, pueden ayudarlos a sentirse un poco menos solos.